Estatuas: no solamente están en la superficie

Cuando se recorre cualquier ciudad, no es raro que haya estatuas, monumentos o placas en conmemoración de personajes ilustres o eventos históricos. Pero, el fondo marino está cargado de misterios.

El Cristo sumergido en dos partes del mundo

En la localidad de San Fruttuoso (Liguria) a 15 metros bajo el agua, se encuentra sumergida una escultura hecha de bronce. El Cristo está en el fondo marino desde 1954 en conmemoración de Darío Gonzatti, uno de los pioneros en el buceo. Darío lamentablemente perdió la vida en un accidente en el sector. Guido Galleti fue el escultor de dicha obra, la cual alcanza casi tres metros de altura.
El hecho de que la escultura tenga las manos de Cristo hacia el cielo es porque este es un signo de paz. Para poder realizar la estatua se fundieron medallas, elementos navales y campanas, además de la escultura, al fallecer Duilio Marcante, amigo de Darío, se colocó una placa en honor a él, la cual se encuentra en la base de la estatua.

El Cristo en la Bahía de Quintero, obra del escultor Mario Calderón, construida a base de cemento y hormigón y de casi cinco metros de altura se encuentra a doce metros de profundidad. El Cristo tiene los brazos abiertos y mirando hacia la superficie, al igual que el de San Fruttuoso. La idea de instalar la escultura fue de Raúl Veas, un buzo profesional chileno que visitó Italia y que quiso dar un lugar de peregrinación para los pescadores y de descanso a los buzos fallecidos. Es así que presentó el proyecto al municipio y en el 2004, su sueño se convirtió en realidad. Los buzos en ocasiones han ido a dejar las ánforas que contienen las cenizas de buzos fallecidos. El Cristo se ha convertido también en un atractivo turístico.

El fondo marino de la Isla de Pascua

Cuando hablamos de la Isla de Pascua nos imaginamos esas playas de arena blanca, con aguas cristalinas y una cantidad enorme de Moái. Se dice que en 1957 cuando un investigador francés estaba estudiando la isla decidió llevarse un Moái consigo. Producto del mal tiempo y del mar agitado, la estatua terminó cayendo del buque al fondo del mar y con el pasar de los años, el agua salada y las corrientes, este se destruyó.
Con la idea de tener un Moái en el fondo marino de la Isla de Pascua, Beto Tonfa (artesano) en el 2004, realizó la escultura que supera los tres metros. El Moái de cemento fue llevado a 300 metros de las costas de Rapa Nui y se encuentra sumergida a 24 metros. Hace años que el Moái es un punto turístico para aficionados y buzos profesionales.

Estatuas de Luca y Alberto

El 18 de junio de este año se estrenó por la plataforma de Disney+ la película Luca, la que está ambientada en Cinque Terre y que se desarrolla en el pueblo de Ponterosso, como según se dice en la película, pero que alude a Monterosso. Es por eso que la región de la Liguria puso en el fondo marino de Monterosso dos estatuas dedicadas a Luca y Alberto, los protagonistas de la película.

Estas dos estatuas son parte de una instalación temporánea, ya que estarán en el fondo marino hasta el 14 de agosto. Las esculturas fueron realizadas por artesanos e ingenieros italianos. Luca y Alberto de dos metros y medio de altura se encuentran a cinco metros bajo el agua y ya se han convertido en una atracción de la localidad.