Son muchos los chilenos que sueñan con una vida en Italia. Muchos de ellos son ítalos descendientes que sienten ese llamado a vivir en la tierra de sus antepasados. Es el caso de Nicolás Oneto, quien dejó Chile para embarcarse en una nueva aventura en el Bel Paese.
Emigrar a Italia
La migración es una especie de círculo que se puede repetir varias veces en una familia en diferentes generaciones. Muchos descendientes italianos sienten ese vínculo con la tierra de sus antepasados y tarde o temprano parten, ya sea para conocer Italia. Es el caso de Nicolás Oneto, cuya familia es originaria de Rapallo en Liguria, quien no dudó en contarnos su historia que quizás sirva a otros chilenos que quieran hacer su vida en la península itálica.
Nicolás, ¿Desde cuándo y por qué vives en Italia?
“Llegué a Italia en marzo del 2017 con mi novia. Decidimos irnos de Chile y venir a Italia a trabajar en el sur, específicamente en Sicilia, en un programa que nos permitía trabajar medio día en un hotel a cambio de alojamiento y comidas, para poder viajar el resto del día y los fines de semana”.
Nicolás, ahora están en Milán. ¿A qué te dedicas?
“Trabajo en Electrolux, empresa manufacturera de electrodomésticos (los dueños de Femsa y Mademsa desde hace algunos años). Desde el año pasado soy el Gerente de Calidad para Europa”.
¿Qué es lo que más te gusta de Milán?
“Lo que más me gusta es la eficiencia de la ciudad y sus servicios, algo que no es descontado en Italia, y la oferta de eventos, actividades y la cercanía con Italia y el resto de Europa: Milán estratégicamente está “cerca de todo”, en 2 horas y 50 minutos podemos ir a Roma en tren y en 6 horas puedes estar en Múnich con el tren”.
¿Cómo ves la situación actual en Italia en cuanto a la movilidad?, ¿ha aumentado el turismo?
“Se ha ido recuperando de a poco. El turismo internacional creo que todavía está bastante detenido, en las ciudades grandes como Milán o Génova, o los lugares turísticos como Sardegna he visto este verano más que nada italianos y europeos. Los “grandes grupos” de turistas asiáticos o latinoamericanos desaparecieron completamente desde el 2020″.
Nicolás, ¿Y cómo está la situación económica en Italia?
“Italia, en términos de indicadores, tiene una economía estancada hace años (hace más de 10 que no crece), pero el hecho de tener una industria manufacturera históricamente potente y pertenecer a la Unión Europea hace que el país sienta menos el poco crecimiento económico. En Milán la situación es diferente, la economía sí crece y se puede ver en la infraestructura: rascacielos, barrios nuevos, empresas que se trasladan a la ciudad, etc”.
¿Cómo celebró las fiestas patrias la comunidad italiana?
“La comunidad chilena es bastante reducida comparada con otras comunidades extranjeras en Italia, pero de todas maneras hay grupos y organizaciones en casi todas las ciudades grandes. Por mi parte me junté con un amigo en Génova en el fin de semana del 18 y coincidentemente nos encontramos en un bar con un grupo de chilenos que vive hace más de 40 años en Italia: obviamente nos reconocimos por el acento y celebramos el 18 juntos”.
¿Cómo son los italianos respecto a los chilenos?
“En realidad no es una cultura tan distinta, ha sido fácil acostumbrarme. Creo que es fundamental poder comunicarse, una vez que hablas italiano no hay ningún problema. La mayor diferencia, desde mi punto de vista, es el sentido de pertenencia a sus localidades. Cada pequeño pueblo tiene sus tradiciones, sus platos y en algunos casos hasta su propio dialecto (ciudades que distan de algunos kilómetros pueden usar palabras distintas entre ellas). La gente en general es muy amable, como lo es en Chile, pero obviamente hay de todo. Creo que las generalizaciones no ayudan y es difícil, o en realidad imposible, catalogar al “chileno” o al “italiano”.
Alguna anécdota de tu vida en Italia que quisieras contar
“Me sigue sorprendiendo lo distinta que es la percepción de las distancias y el concepto de “lejos” y “cerca”. En Chile para viajar dentro del país son horas de bus o también vuelos, mientras que en Italia cualquier viaje de más de 30 minutos es considerado un lugar “lejano”. Cuando le he mostrado a italianos que la distancia de Arica a Punta Arenas es el equivalente de ir desde Estocolmo hasta Marruecos, no pueden creerlo”.
Nicolás, ¿Tienes pensado volver a Chile?
“Eventualmente sí pero no hay nada planeado. Podría ser muy pronto o no tan pronto, nunca se sabe. Lo que más extraño es obviamente familia y amigos, es algo que creo que es imposible de reemplazar estando afuera”.
Autor imagen de portada: Nicolás Oneto.
Che bravo!
qué ganas de agarrar las maletas y vivir en Italia
Una rondine non fa primavera. La vida en Italia està lejos de ser fàcil. Conseguir un trabajo en el norte haciendo trabajillos puede que sea sencillo ( entregar pizzas en bicicleta, hacer limpieza). Estabilidad laboral es absolutamente relativa, contrato indefinido una ilusion. Hay que tener suerte. Y mucha, para caer de pie. Agradecer y prender velitas a los santos. Venirse a Italia es para valientes. Quienes ven Italia de lejos tienen una vision muy romàntica. Cuando uno ya “se casa” con la vieja y tiene que convivir con todas sus manas y aun asi ama a la vieja fregada, entonces realmente tienes una conciencia de que Italia es tu lugar en el mundo. Yo me casè con la vieja hace 7 anos, a veces me hace renegar, a veces la adoro, a veces me hace regalos inesperados. Pero para mi no hay marcha atràs hace 7 anos me case con Italia, hoy conozco a esta vieja pesà, y la amo con locura. No hay mirar para el lado y mucho menos hacia atràs.
Bravissimo Nicolás 👏