Escritora, novelista, poetisa, traductora y prosista, Elsa Morante es una de las mujeres más importantes de la literatura italiana del siglo XX. Autora de obras tales como Mentira y Sortilegio, La Storia y La Isla de Arturo, Morante es una de las italianas más leídas y traducidas al castellano en el último tiempo. El 18 de agosto se cumplirían 111 años de su nacimiento, por eso hoy, en ItChile te contamos más sobre la vida de esta escritora y qué obras sí o sí deberías tener en tu biblioteca. Acompáñanos en este recorrido.
Una escritora precoz
Elsa Morante nació en Roma y de muy joven vivió una turbulenta historia familiar. Sus problemas de salud le impidieron ir a la escuela primaria con normalidad. Por eso, recluida en su casa, comenzó a inclinarse precozmente por la escritura. Ya cuando tenía menos de veinte años escribía para varias revistas italianas como Il Corriere dei Piccoli, Il Meridiano di Roma, I Diritti della Scuola y Oggi. Ni bien terminó la secundaria, Elsa Morante se marchó de su casa y dedicó su vida a dar clases privadas y a escribir para distintas publicaciones. En 1941, publicó su primer libro, Il Gioco Segreto, un primer acercamiento a la literatura juvenil. Un año después, editó un libro para niños, Le Bellissime Avventure di Caterì dalla Trecciolina.
Elsa Morante, de Italia al mundo
Al ser hija de una madre judía, tras el estallido de la Segunda Guerra Mundial, Elsa Morante siempre sintió que corría peligro. Por eso, en la década del 40, ella y su esposo, el escritor Alberto Moravia se trasladaron a Fondi, en el valle de Latina. Este lugar se convirtió en el escenario de muchas de las obras de ambos artistas. Además, fue en esta etapa cuando Elsa comenzó a traducir a Katherine Mansfield. La escritora neozelandesa, cuyas últimas obras dan cuenta de su paso por Italia, influenció notablemente a Morante. Una vez terminada la guerra, ella y Moravia entraron en contacto con el circuito literario anglosajón. Gracias a su amistad con William Weaver, el matrimonio Moravia-Morante comenzó a dar a conocer sus obras en Estados Unidos.
De La Isla de Arturo a Aracoeli, ¿por qué leer a Elsa Morante?
En sus obras, Elsa Morante retrata la ambivalencia de personajes que están en búsqueda de sí mismos y de su identidad. Al mismo tiempo, Morante también da cuenta de los diferentes aspectos de la Italia de mediados de siglo XX. La Isla de Arturo, que le valió un premio Strega, da cuenta de cómo un adolescente va descubriendo el mundo de las pasiones, el amor y los celos. La Historia, otra de sus grandes obras, tiene como tema central las vivencias de una viuda judía. Muestra la vida durante la Segunda Guerra Mundial y los primeros años de la posguerra italiana. También, denota las secuelas que el régimen nazi dejó en las vidas de los italianos. Aracoeli, una de sus últimas novelas, habla de la búsqueda de un joven y esas raíces que cada vez lo atraen más, porque tal y como dice el dicho, “la sangre no es agua”.
El legado de Elsa Morante
Elsa Morante falleció en 1985. Tras su muerte, varias de sus obras cobraron especial importancia a la hora de tocar temas muy relacionados con el pensar y el sentir de los italianos. Las guerras, el racismo, la discriminación y la búsqueda de la identidad y las raíces son temas recurrentes en sus novelas más populares. Conocer de primera mano la vida de los jóvenes en una Italia con ansias de superación se volvió crucial para entender el surgimiento del llamado “milagro italiano”. Definitivamente, leer a Elsa Morante es un poco reconstruir cómo era esa Italia desde la que vinieron nuestros padres y abuelos. Por eso, es una escritora imprescindible.
