Hielo, prosecco y soda. Esos son los ingredientes fundamentales para hacer una de las bebidas italianas más populares dentro y fuera del territorio de nuestro belpaese. ¿De qué trago hablamos? Del Spritz. Es italiano y eso es innegable, pero hoy prácticamente es patrimonio de la cultura gastronómica del mundo entero. Sus orígenes se remontan a comienzos del 900, cuando los oficiales austrohúngaros afincados principalmente en el Véneto y el Friuli entraban en las tabernas o restaurantes y pedían vino. Para ellos, esta bebida en Italia era demasiado fuerte y lo “suavizaban“ con soda o agua carbonatada. De ahí viene el nombre spritz como práctica y simple de decir de “sprizzato“. Todos los detalles de su historia y preparación en el video de nuestro canal de YouTube Italiani en Latinoamérica 👇
Prácticamente, se puede “sprizzar“ cualquier bebida. Todo lo que pueda incorporar prosecco y soda puede convertirse en un Spritz. Hoy, la cantidad y las posibilidades a la hora de crear un Spritz es ilimitada. Existen algunos cuyo aperitivo base es el Cynar y otros que incorporan amaros como el Fernet. En Venecia, las variedades existentes no incluyen el Aperol. El spritz, allí llamado “el Veneziano“, se hace con Select, prosecco y soda. En otros casos, el Aperol puede reemplazarse por Campari y así se obtiene un trago menos dulce pero muy pedido en los bares. ¿Tienes algún sprizzato preferido? Cuéntanos cuál es.
Visita nuestro Canal de YouTube en el siguiente link para más videos: Italiani en Latinoamérica
