Calendarios de Adviento: esperando Navidad

Como sabemos la época de adviento es aquella durante la cual esperamos la llegada de la Navidad. Una manera de hacerlo es comprando o realizando un calendario, el cual, a través de los años, ha ido evolucionando. Su origen es antiguo, pero continúa atrayendo a grandes y chicos. En palabras simples los calendarios de adviento tradicionales se realizan de cartón y contienen 24 casillas o ventanas enumeradas del 1 al 24. Cada día se abre una de ellas y se encuentra una sorpresa en su interior. Es una linda manera de esperar la navidad junto a los niños, de hecho, se creó inicialmente pensando en los más pequeños de la casa.

El origen de los calendarios de adviento

El calendario de adviento o navideño se origina en Alemania durante el siglo XIX cuando las familias se preparaban para la espera de la navidad. Colocaban la Corona de adviento con sus cuatro velas y prendían una por cada domingo del mes de diciembre. Esta tradición fue derivando en otras maneras de llevar la cuenta, como, por ejemplo, realizar marcas en las paredes o puertas. También, en algunas casas se hacían 24 marcas a una vela y se dejaba que esta se consumiera hasta cada marca por día. Existía otra forma tradicional de esperar la navidad en las casas en las que se contaba con un pesebre. Consistía en pedirle a los niños que pusieran una ramita o pluma en la cuna del niño Jesús. Los más pequeños de la casa, además, podían realizar marcas con tiza e irlas borrando al pasar de los días.

Pero ¿quién creó el primer calendario? Bueno, según lo que hemos averiguado fue en el año 1902 en la ciudad de Hamburgo donde se imprime el primero de ellos. Según se sabe, su creador fue Georg Lang quien vendía imágenes navideñas para ser recortadas y pegadas en las veinticuatro ventanas del calendario. Más tarde, lo modificó e incorporó 24 ventanitas que se abrían y contenían un bizcocho e imágenes navideñas.

El calendario llega a Italia

A medida que surge la impresión en serie, los calendarios se hicieron más populares. La tradición de origen protestante se difundió a otros países, e incluso religiones. A Italia llegaron de la mano de la pastelería Galli de Milán. Si bien el material tradicional era el cartón, en Italia fueron primeramente confeccionados de tela.

En Italia, el calendario adquiere características propias de cada región y sus tradiciones. Como en Legnano, donde desde 2017 se realiza el calendario en la fachada de un edificio de la cuidad y al abrir las ventanas las personas pueden apreciar una obra ilustrada. Algo similar ocurre en Bolzano que cuenta con el calendario de adviento más grande utilizando 24 ventanas del Palazzo Max Valier.

Los novedosos calendarios de adviento este año en Italia

Este año no faltarán las novedades en cuanto a calendarios en Italia. Por ejemplo, ¿sabían que hay calendarios de adviento para las mascotas de la casa? Así es, una empresa creó uno especialmente pensado para perros, gatos o conejos enanos que contiene 24 sorpresas comestibles para ellos. Para los amantes del vino llega un calendario que les permitirá degustar cada día el contenido de 24 botellitas diferentes. En el mismo rubro será posible encontrar calendarios de una empresa “online” llamado Beery Christmas, que obviamente ofrece variadas opciones de cerveza. La tradición del café italiano será representada también este 2021 a través de un calendario. Para este año la marca Nespresso ha creado una edición limitada de este original calendario. Por último, los fanáticos de los superhéroes podrán encontrar un calendario de la marca Lego inspirada en la popular saga de Marvel “Los Vengadores”.

Hecho en casa

Quienes amamos las manualidades podemos aprovechar esta época del año para dejarnos llevar por la imaginación y crear nuestros propios calendarios de adviento. Podemos convertir diferentes materiales y reciclarlos en un hermoso diseño para nuestro hogar. A continuación, les damos algunas ideas.
Pueden confeccionar bolsitas de papel, ya sea “kraft” o restos dejados por aquellos trabajos manuales del colegio. Con un lápiz o plumón las enumeran y las pueden colgar en la baranda de la escalera, las ramas del árbol de navidad o sobre la chimenea.

Obviamente podrán elegir qué poner en cada una de ellas. Puede ser un mensaje, un dulce o galletas hechas por ustedes mismos. No boten a la basura las cajas de fósforos, se pueden pintar o forrar con un lindo papel. ¿Tienen retazos de tela? Perfecto, armen bolsitas y pueden, ya sea bordar o pintar los números en cada una y ponerlas donde quieran. Ya sea que prefieran comprar un calendario de adviento, tanto “online“, en una tienda especializada o lo hagan ustedes mismos, lo esencial del calendario es y será la dulce espera de la llegada de la Navidad.