Volver a las raíces, un viaje maravilloso

Ser hija de italianos y haber nacido en Chile no es sencillo, siempre está la añoranza de volver a las tierras de origen. Ana Carla es una de esas descendientes y día a día trasmite la italianidad. Viajar a Italia con su familia se convirtió en uno de sus deseos más profundos. La idea fue tomando forma durante los primeros meses de este año. Cuando comenzó a organizar el viaje, eran muchas las ideas que se le venían a la mente. Tantos lugares que visitar, fechas que debía hacer coincidir y tantas ganas de estar todos reunidos allá. En esta nota revisaremos esta hermosa experiencia familiar.

La idea de volver a Italia

Cuando las personas nacen en una familia italiana que mantiene vivo el idioma, las tradiciones, la comida y la cultura, se hace difícil el día a día al otro lado del océano. En la casa de los Brignole Di Monte se respira italianidad, llegando a veces ser incomprendidos por el resto. Los demás les dicen que son chilenos, a lo que ellos contestan, que por sus venas solamente hay sangre italiana.
Ana Carla Di Monte quería hacer un viaje diferente. Determinó que lo quería hacer en grande. Fue así que invitó a toda su familia a la tierra de sus padres, la amada Italia.
Ana Carla nos cuenta: “el destino, en ocasiones, nos brinda alegrías y emociones inolvidables. Mi familia materna Giordani-Righetti proviene de la ciudad de Lerici, Liguria. El viaje esta vez lo hicimos dalle Ande agli Appennini. Así, nos embarcamos hacia Italia, mis hijas, yernos y nietos en el mes de septiembre, algunos volvían y para otros era la primera vez”.
“Lo que agradezco a mi madre fue que me haya transmitido el cariño por su patria. Hoy junto a mi familia dejamos una huella de complicidad y reconocimiento de nuestros orígenes. Gracias por todo, por el viaje, por volver a nuestra tierra y ser una gran familia”.

Lo que significó volver a Italia para las hijas de Ana Carla

“Este viaje fue un regalo en todo sentido. Gracias a la generosidad y “locura” de mi mamá, pudimos ir en familia a Italia. Algo jamás pensado. Además, pudimos mostrarles a nuestros hijos, sobrinas y cuñado lugares maravillosos. Deleitarnos con la comida, ¡donde uno se detuviera a comer era exquisito! Fainà, helados, quesos, focaccia… ¡Uff cuánto comimos! Volver a ver y conocer parientes fue emocionante. Disfrutar de la tranquilidad y amabilidad de la gente. Siempre con un figurati, prego”. Son las palabras de Silvana, la hija mayor.

“Este viaje fue un gesto de generosidad enorme de mi mamá, que nos llevó a todos a la bella Italia, fue un viaje que nos permitió el reencuentro de nosotros como familia, nonna, hermanas, primas, hijas, sobrinas, cuñados, maridos, etc. Un reencuentro en la tierra de i nostri nonni“.

El reencuentro con Italia

“Mi hija Fiorella se reencontró con Italia; mi hija Amalia alucinó con poder ver en vivo todo lo que le contamos por mucho tiempo; y Nicolás, mi marido, entendió por qué esta familia ama tanto a Italia. Nos fuimos con ganas de volver. Agradecer a nuestra mamá por tan linda oportunidad de estar todos juntos en la bella Italia.” Palabras de Francesca, segunda hija de Ana Carla.

“Cuando llegamos a Italia me sentí en casa, los olores son los que he sentido toda mi vida y el idioma, realmente emociona, es como si toda palabra estuviera dicha con pasión. Almorzamos en Lerici con los parientes de mi nonna Enia. Qué almuerzo más lindo. Reímos, cantamos y nos emocionamos. Estuvimos en Levaggi, lugar de donde viene la familia de mi papá, debo decir que cuando vi a uno de mis parientes no pude contener el llanto. Con razón i miei nonni no querían dejar Italia, es un paraíso. Grazie mamma”. Palabras de esta redactora, la hija más pequeña.

Volver a Italia luego de tantos años

Fiorella, es la nieta mayor, ella había estado en Italia hace años atrás. En esta oportunidad tomó su mochila y una maleta en cabina, no quiso perder la oportunidad de estar en familia, a pesar de que fueron diez días intensos. Así es, porque algunos llegaron primero, otros entremedio y una sobrina, al final. Así fue que, por diez días, llegaron a ser diez personas, así como lo leen, “la tropa” estuvo completa por diez días en Italia.
Esto fue lo que dijo: “Se terminó una experiencia única, que jamás pensé vivir. Agradezco desde el fondo de mi corazón a la nonna, que pudo hacer este maravilloso viaje posible, y a cada uno de los que formaron parte de él para convertirlo en una aventura inigualable.“

“Qué lindo fue conectar con las raíces italianas, entender y gozar la cultura, poder sentir ese maravilloso aroma a café y focaccia en las mañanas, tener la oportunidad de conocer Lereci, y así entender por qué la nonna Enia extrañaba tanto su tierra. Además de poder conocer Levaggi y a todos los familiares del nonno, y darse cuenta por qué a él le gusta tanto la Sierra (Sierras de Bellavista) jajaja“. Palabras de Fiorella

El primer viaje a Italia de Giulia

Ir a Italia por primera vez es alucinante, mucho se ve en las fotos y películas, pero ¿y el día a día?, Giulia tiene doce años, es la segunda nieta de Ana Carla y estas fueron sus palabras al respecto: “Este viaje para mí fue un hermoso regalo para el corazón. Pudimos conocernos mejor. Descubrir mis orígenes y entender esa locura que tienen por Italia. Me permitió salir un rato de la realidad. Fue una muy linda experiencia en familia. Grazie nonna!”.

Un hermoso viaje

Un viaje maravilloso, las ganas de volver se adueñaron de sus corazones. Italia marcó a la familia Brignole Di Monte. “Conocimos bellos lugares, tuvimos muchas aventuras, comimos de los dioses, caminamos mucho y lo más lindo fue poder reunirnos con la familia que vive en Italia y entender por qué siempre los viejos extrañaban tanto Italia, sus olores, su gente, su calidez y su alegría”. Palabras de Francesca.
Fiorella nos menciona “Agradezco haber podido compartir tantos días con mi mamá y la Amalia, y poder maravillarnos juntas de todo lo espectacular que este hermoso país tiene por entregar”.
No hay forma en que ellos se puedan desligar de Italia. ¡Sin duda, un hermoso viaje!

Imagen de portada: Familia Brignole Di Monte en Monterosso. Autor: Nicolás Torres.