La Semana Santa en Italia es una época de celebración y tradición, especialmente en lo que respecta a su gastronomía. Durante estas festividades religiosas, las mesas italianas se llenan de platos tradicionales que tienen un profundo significado cultural y religioso. A continuación, exploramos algunas de las delicias culinarias más emblemáticas de la Semana Santa en Italia.
Pasqualina, una de las protagonistas de las mesas italianas
Originaria de Génova en el siglo XV, la pasqualina es un exquisito pastel. Compuesto por 33 capas de masa, en recuerdo de los años de vida de Cristo según las antiguas recetas. Estas capas se rellenan con una mezcla de acelgas o alcachofas, prescinseua ligure (cuajada fresca de sabor ácido), huevos y maggiorana, creando un sabor único y tradicional.
Cordero
El cordero es el plato principal por excelencia en el almuerzo de Pascua en Italia. Preparado de diversas formas según la región, desde al horno con patatas hasta aromatizado con romero y cebolla. El cordero simboliza tanto la Pascua judía como la cristiana, siendo un elemento central en la tradición culinaria de estas festividades.
Huevo
Los huevos juegan un papel importante en la Semana Santa italiana. Desde la antigua costumbre de llevar huevos cocidos a la iglesia para ser bendecidos hasta su asociación simbólica con la vida y la resurrección. Los huevos cocidos se disfrutan acompañados de embutidos y otros platos típicos de la temporada.
Affettati
Los embutidos italianos, como la soppressata, el salami, el capocollo, el jamón crudo, el lomo de cerdo, la pancetta y la porchetta, representan el orgullo culinario del país. Durante la Pascua (o como desayuno en el centro de Italia), estos embutidos son un elemento esencial. A menudo servidos como aperitivo junto con huevos duros. En la región de Campania, este plato de embutidos mixtos se conoce como “fellata” y también incluye ricotta salata, un tipo especial de ricotta seca y con un sabor fuerte, muy popular en las regiones del sur de Italia.
Pasta Casera
La pasta casera es una presencia indispensable en la mesa durante la Semana Santa, con una variedad de formas y rellenos según la región. Desde los agnolotti piamonteses hasta las lasañas emilianas, la pasta casera refleja la diversidad y riqueza culinaria de Italia.
Torta al formaggio
Con su masa a base de harina, huevos, quesos pecorino y parmigiano, es un postre clásico de la Semana Santa en regiones como Umbría y Las Marcas, acompañando los desayunos festivos junto a embutidos y huevos cocidos.
Casatiello
El casatiello napolitano es un pastel rústico relleno de delicias como tocino, salami, huevos duros y provolone, consumido tradicionalmente la noche del Sábado Santo y manteniéndose suave y delicioso durante varios días gracias a su preparación con sebo en la masa.
Verduras y Habas
Los platos de verduras, como los cardoncelli en Basílicata y las alcachofas en Apulia, ofrecen una variedad de sabores frescos y primaverales que complementan perfectamente la carne de cordero en las comidas de Pascua.
Brasato al Barolo
En el Piamonte, el estofado en Barolo es una alternativa al cordero como segundo plato, con una preparación lenta y aromática que realza los sabores de la carne de vacuno y el vino tinto.
Impanata ragusana
Este es un plato emblemático de la gastronomía siciliana que tiene sus raíces desde la dominación española en la isla. Consiste en una focaccia elaborada con capas de masa que pueden rellenarse de diversas maneras, aunque durante la Semana Santa se rellenan típicamente con carne de cordero o cabrito. Esta carne se cocina lentamente con vino tinto y confitura de tomate, lo que le proporciona un sabor único y delicioso a este plato tradicional siciliano.
Y ustedes ¿Conocen otras preparaciones típicas de esta fecha tan especial?
